Nos sumamos a los millones de cristianos que desde ayer están elevando a Dios sus oraciones más emocionadas por las víctimas de accidente aéreo de Madrid ocurrido ayer en el Aeropuerto de Barajas.

Somos conscientes del drama personal y social que un hecho de estas características supone para todo el país. Queremos unirnos en el afecto a todas las familias víctimas del accidente, encomendando a todos sus familiares que han fallecido, y pidiendo para ellos la paz que sus mismos familiares puedan ya enviarles desde la Presencia del Padre.

Os proponemos una pequeña oración con la que podemos sumarnos a la oración por estos hermanos nuestros. 

Dios de la vida, Dios de los que sufren,

Dios de todos los hombres que están en necesidad,

encomendamos a tu misericordia a

todos tus hijos que murieron en el

accidente aéreo de Barajas.

Ponemos en tu presencia los nombres de las 153 víctimas,

niños, jóvenes, adultos, ancianos,

algunos de ellos familias enteras,

que han visto truncarse sus vidas de modo repentino y violento.

Concédeles ahora la plenitud de la vida que buscaban,

dales la felicidad que anhelaban, vivida en el amor a su familia y a sus amigos,

repara los proyectos que sus corazones albergaban,

Y cumple los sueños con los que esperaban llenar una vida larga y feliz.

Dales una vida llena de paz, de felicidad, de luz,

viviendo en un amor imperecedero, en una alegría inacabable.

Concede a sus familias el consuelo necesario,

la esperanza que ahora les falta, la luz que han perdido.

Otorga la pronta salud a los heridos y su total restablecimiento,

y a nosotros,

ayúdanos a confiar a Tí nuestras vidas, tan frágiles, 

para que nos concedas una existencia aquí en la tierra

útil, tranquila, entregada a los demás,

y aprendamos a querernos más

y a luchar por una sociedad mejor y más humana.

Por Jesucristo, Nuestro Señor. 

DALES, SEÑOR, EL DESCANSO ETERNO,

Y BRILLE PARA ELLOS LA LUZ PERPETUA.

DESCANSEN EN PAZ. AMÉN. 

La Parroquia está ofreciendo oraciones por el descanso eterno de las víctimas en la Eucaristía diaria y en el Rosario.